Se encontraban
junto al puente de hierro sobre el rio que separaba la ciudad en dos. Miraban
lo bonitas que eran las vigas de hierro y los remaches que las penetraban.
Una pareja de
jóvenes se engarzaban con brazos y manos demostrándose su cariño. Él veía la
parte del rio alejarse hacia otro puente sujeto de cables de acero a modo de
arpa. Los patos nadaban a contracorriente buscando un hueco para esconderse.
Ella veía acercarse un pequeño barco a favor de la corriente, donde también
retozaba una pareja cobijados debajo de la sombra de un gran paraguas. Árboles
y arbustos les producían una sensación de paz que se confundían con las miradas
que se cruzaban. No se llegaron a besar nunca. No era necesario. Juan y Ana
llevaban casados más de siete años y tenían una pareja de niños que se
incorporarían a la sociedad que habían construido sus padres, sus abuelos, los
padres de sus abuelos y …. Que felicidad! A la vuelta de casa les esperaba la
abundancia, seguridad y paz.
El despertar
del sueño fue dramático; el más pequeño venía a llorar a la parte de la cama
donde estaba dormida Ana. Juan se levantó para comprobar la hora porque tenía
un trabajo precario que empezaba a las 6 de la mañana.
Era primero de
mes y no sabía si tendrían para pagar todas las facturas. Recordaba cuando se
casó, que no le preocupaba nada. Tenía un buen puesto de trabajo que perdió por
mor de la crisis. La luz, el agua y teléfono no eran sus preocupaciones más
importantes. Si lo era su recién estrenado matrimonio con Ana.
Abrió un sobre
de la compañía de la luz que había llegado el día anterior. Se asustó.
Cada vez gastan menos luz y sin embargo la factura era mucho mayor.
Eran las 4 de
la mañana y el niño se había quedado acurrucado junto a su madre. Tenía tiempo
aun antes de ir al trabajo y se había desvelado. Juan era muy minucioso y
guardaba todas las facturas desde que se había casado. Busco la del primer mes
y vio que habían pasado siete años y medio; la comparó y se llevó un disgusto
fenomenal. Como ingeniero que era, calculó la factura a igualdad de energía
consumida, comprobando que se había incrementado un noventa por ciento. ¡Qué
barbaridad! a un 9 por ciento anual de incremento. Y ¿porqué? se preguntó Juan.
Por las veleidades de Zapatero al apostar por unas energías renovables que no
podíamos pagar. Por la cantidad de compromisos políticos que conlleva que el
precio este prácticamente en régimen de monopolio. Por la política de huida
hacia delante de las cúpulas de las organizaciones empresariales con sueldos de
escándalo y malas inversiones. ¿Por qué? ¿O es que mis amigos González, Aznar,
Zapatero, ministros y directores generales esperan alguna compensación?
Juan se fue
deprimido a dar un paseo antes de ir a trabajar. La noche siguiente soñó con el
yate, el Continental GT, el piso de 300 metros en la castellana y la casa de
verano en Cantabria que posiblemente tenía el presidente de la compañía de
electricidad que le suministraba los kilovatios imprescindibles para su vida. Siguió
durmiendo hasta que le volvió a despertar su hijo mayor con dolor de barriga y
otra vez le dejó junto a su mujer.
Otra vez
desvelado y preocupado. Pero esta vez no cogió la factura del agua, sino que se
puso la última de James Bond.
España y yo
somos así.
PD: Esto lo
cuento porque me lo mencionó personalmente Juan. Antes de escribir esto me
propuse hacer los mismos cálculos que hizo esa mañana de verano y los datos los
muestro en esta tabla (me dijo que tenía una potencia de 4,4 Kw y que consumió
210 Kwh).
Concepto
|
Fecha del matrimonio
|
7,5 años despues
|
Incremento
|
Potencia contratada Kw
|
4,4
|
4,4
|
0%
|
Precio Kw/mes
|
1,6957
|
3,8533
|
127%
|
Total potencia contratada
|
7,46
|
16,95
|
127%
|
Energía Consumida Kwh
|
210
|
210
|
0%
|
Precio Kwh
|
0,1125
|
0,16
|
42%
|
Total energía consumida
|
23,63
|
33,60
|
42%
|
Impuesto energía
|
5,13
|
5,13
|
0%
|
Total impuesto de energía
|
1,59
|
2,59
|
63%
|
Alquiler aparatos
|
0,589
|
1,2984
|
120%
|
Impuesto valor Añadido %
|
16
|
21
|
31%
|
Total IVA
|
5,32
|
10,89
|
105%
|
Total factura
|
38,59
|
65,34
|
69%
|
Si me permitís
otro poco de vuestro tiempo fijaos en que el incremento de la energía es de un
45%. Que el incremento del término de potencia (es un valor que consumas o no
lo tienes que pagar) es de un 127%. El incremento del IVA es un 31%. Para
confirmar la poca vergüenza de los responsables de los precios el alquiler de
los aparatos es de un 120%. Hoy día en donde los equipos electrónicos valen
infinitamente menos que lo mecánico, como se justifica eso.